martes, diciembre 04, 2007

Lágrimas de mero

Vaya fin de semana de tres días nos hemos pegado unos amigos y yo en Sevilla. No recuerdo el número de bares y tapas visitadas debido a que no recuerdo el número de "servesicas" que hemos destilado en nuestros cuerpos. Resumiendo podríamos decir que: Sevilla no tiene uno, sino una paleta de colores especiales que ni el Sr. Pantone. Que la Giralda carga los cuadriceps, que los coches de caballos van más rápidos que el nuevo tranvía, que lo del Betis y el Sevilla es mentira (no hemos encontrado ni un fan), y finalmente debeis saber que si una gitana os lee la mano a precio de billete, os dirá que sereis muy felices, tendreis 3 hijos y dentro de 15 días una noticia maravillosa.

[Id a Sevilla]

Además, siempre podeis pasear por el parque de María Luísa, (una que comía bocadillos de lentejas según nos dijo el cochero), y recibiréis la visita inesperada de un personaje entrañable que aparece de los matorrales y os persigue allá donde vayáis, con su punteado y su voz angelical.

Os presento a "El Duende".
(Nota: no perderse el comentario final de el Duende)

1 comentario:

Marisabidilla dijo...

Yo quería ir pero si me pilla la gitana y me dice que voy a ponerme a parir cual Infanta Cristina pues ya como que me lo pienso... no vaya a ser que lleve razón